Quizás ya tengas el trabajo y la vida de tus sueños. En ese caso, enhorabuena, me alegro mucho por tí.
Pero si no es así, tendrías que preguntarte cómo ha pasado eso.
¿Un exceso de realismo?
«Voy a estudiar algo donde sé que voy a encontrar trabajo»
¿Has aceptado el primer trabajo que te han ofrecido, con todo el mundo felicitándote por ello?
«Da gracias de que tienes un trabajo. No te tiene que gustar, un trabajo es un trabajo. Así es la vida…»
¿Te has creído el cuento de la carretera de sentido único?
«Estudia, así tendrás un buen trabajo de por vida, y como premio hipoteja-pareja-hijos-perro-coche, y así tu vida será perfecta».
El destino sí es único e igual para todos: vas a palmarla amigo (espero no te lleves una sorpresa). Sobre eso no puedes hacer nada, pero sí puedes decidir cómo quieres vivir tu vida.
En un tiempo suficientemente largo, las probabilidades de supervivencia de todos se reducen a cero».
– Tyler Durden
Entonces ¿te has dejado llevar por la corriente? ¿Te has dejado arrastrar?
Yo sí, durante años, pero le estoy poniendo remedio.
¿Que hacer con mi vida? El sueño de los perdedores
¿Está tu vida alineada con lo que quieres?
¿Sueñas con ganar la lotería y montar un chiringuito en alguna playa caribeña?
Parece un sueño común, pero es el sueño de los perdedores.
La realidad parece ser otra.
Muchos empresarios de éxito, en lugar de aplicar esa fórmula a sus vidas, lo arriesgan todo montando otra empresa.
O muchos corredores, una vez completada su carrera de 10 kilometros, empiezan enseguida a prepararse para correr un medio maratón, y luego un maratón.
Y cuidado, no pienses que me creo el cuento de que los emprendedores como ganadores y modelo a seguir. Esa es otra historia que quieren colarnos. Sólo vale para los que quieran recorrer ese camino entre los infinitos posibles.
Quizás la felicidad no se alcanza viviendo en un paraíso natural sin preocupaciones de dinero, sino más bien reside en luchar para ir siempre un paso más allá: mejorar en nuestras habilidades, aprender cada día, hacer nuevas experiencias.
Además la felicidad es muy efímera si la ligamos a un objetivo concreto: aunque lleguemos a ello, la felicidad duraría un instante… y luego querríamos ir más allá, o descubriríamos que no era todo lo increible que imaginábamos.
La realización personal (prefiero este término a la palabra «felicidad») reside en el camino más que en la meta. Si consiguiéramos disfrutar del proceso, nuestra felicidad sería más duradera.
Es otro tópico, lo sé, pero a veces los tópicos tiene algo de verdad (lo cual es otro tópico ;-))
Descubre tu pasión en 5 minutos
Hay quien cree que 5 minutos pueden ser suficientes para descubrir nuestro propósito, nuestra vocación:
También hay quien afirma que el mantra de Sigue Tu Pasión es un consejo equivocado.
Sea como sea, me queda claro que la realización personal y profesional llega cuando eres capaz de encontrar la intersección entre tus habilidades y las necesidades y/o deseos de un grupo de personas.
Nuestra educación católica nos ha repetido que el sentido de la vida viene del servicio a los demás… y quizás haya mucha razón en ello.
La grande diferencia es que no es necesario introducir la idea de sacrificio – menos todavía la de pecado o culpa – sino que al contrario, este concepto pueda ir ligado al disfrute.
O sea que si quieres pasártelo bien, puedes hacerlo dando riendas sueltas a tu creatividad.
Los años pasados arrastrado por la corriente te pueden transformar en una persona pasiva, que sigue la corriente sin rechistar. Lo digo por experiencia.
Sólo esperas cada día el final de la jornada laboral, cada semana el weekend, y cada año las vacaciones.
Muchos esperan cada semana al viernes, cada año al verano, y toda su vida a la felicidad
Sólo tienes una vida, y ha llegado el momento de vivirla según tus reglas.
De esto va el Club de la Lucha Creativa: va de montar pequeños proyectos creativos personales, que en mi opinión son una vía de bajo impacto para empezar a retomar las riendas de tu vida y empezar a nadar hacia una dirección determinada.
A crear tu propio camino y retomar las riendas de tu vida.
Y no tienes porqué ponértelo más difícil. Proceder en soledad es más complicado que ir acompañado, y es más fácil abandonar.
Sin embargo, si tienes a un compañero o compañera de lucha a los que rendir cuentas, es menos difícil.
No existe una lucha demasiado pequeña o grande, correcta o equivocada. Siempre que se trate de tu lucha y de tu proyecto.
Si quieres más ideas, puedo coger prestado el cerebro de otros y dejarte algunas:
Cómo encontrar tu propósito y tomar las riendas de tu vida:
- El Creo del Artesano: no somos lo que hemos estudiado, somos artesanos (Josh Kaufman).
- Cómo encontrar tu propósito – y vivirlo (Keith Yamashita).
- Cómo tomar las riendas de tu vida (Derek Sivers).
Estos discursos sobre cómo encontrar tu propósito pueden llegar a ser empalagosos.
Por esto, termino con una super reflexión de Hunter Thompson:
Cada persona es la suma de todas sus experiencias. Al cambiar tus experiencias, te vuelves una persona diferente, y como consecuencia también tu perspectiva cambia. Y esto pasa una y otra vez. Cada reacción es un proceso de aprendizaje, y cada experiencia significativa modifica tu perspectiva. Por lo tanto ¿no es una tontería ajustar nuestra vida a las peticiones de un objetivo que vemos desde un ángulo diferente cada día? ¿Cómo podemos esperar de conseguir otra cosa que no sea volvernos unos neuróticos chiflados?»
Hunter Thompson
Así que avisado estás.
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